SOBRE EL TRABAJO DEL ASISTENTE DEL
DIRECTOR (2)
Por Mario Crespo
Publicado inicialmente en Cine Cubano. La pupila insomne, lo traigo ahora a mi blog con algunas adiciones y comentarios.
Hay una vieja conseja que reza que si las
cosas salen bien en un rodaje, es mérito del director, pero… si resulta un
desastre, es culpa de sus colaboradores. Nada más falso. El cine, ya lo sabemos
de sobra, es la más colectiva de las artes y si hay éxitos o errores, estos
pueden perfectamente repartirse y, cada uno, llevar a casa su pedacito de
gloria o de fracaso después de cada día de rodaje.
En mi opinión, quien lleva, después del
director, el mayor peso en la organización y preparación creativa de un filme,
es el primer asistente del director ( en ocasiones es un director asistente,
porque es alguien que tiene experiencia como director de cortos de ficción o
documentales o en teatro), puesto que siendo éste quien más tempranamente se
incorpora al trabajo con el director y el productor, funge como enlace entre
éstos y los otros departamentos artísticos, técnicos y de servicio que se van
incorporando paulatinamente al trabajo de pre producción. Si el asistente del
director o primer asistente, lo es de verdad, intervendrá representando al
director en todo lo referente a la producción, organizando el plan de rodaje
junto al productor de campo también el desglose del guión; viendo y
supervisando las locaciones y la confección de los vestuarios. Tendrá a su
cargo la selección de los extras y figurantes y entre estos últimos, se ocupará
de hacer algunas pruebas de actuación para tener unos buenos y creíbles fondos
detrás de los actores del filme.
Organizará además los calendarios de
pruebas de vestuario y maquillaje de actores y figurantes, si son necesarias para
el director, el director de fotografía y director de arte y estará presente en
ellas, tomando nota de todo lo que allí se decida, además de medir el tiempo
que lleva cada uno de estos procesos para después escalonar los llamados de los
actores y organizar un plan diario de filmación que resulte cómodo y eficiente
a la vez al director, los actores y el productor.
Ya en el rodaje, es el jefe de escena y
controla la disciplina en el set, monta las puestas en escenas de fondo con
extras y figurantes en aquellos planos que se requiere movimiento en grandes
espacios, sean en interiores o exteriores y tiene a su cargo la entrada y
salida de los actores al set para sus turnos en el rodaje. Toma letras a los
actores y si el estilo de trabajo del director lo permite, tiene los primeros
planos del día listos, avisando de los detalles de su realización a los
utileros ambientadores, a los maquinistas, electricistas y camarógrafos.
Muchas otras cosas atiende el asistente
del director, tantas, que Germinal Hernández, ( sonidista cubano fallecido)[1] quien además de ser un gran sonidista de estudio y de campo, tenía un proverbial talento para los motes y caricaturas, nos bautizó
“resistentes de dirección”
En otras oportunidades, contando algunas
anécdotas de mi trabajo como asistente de varios directores, se irá perfilando
más este importante oficio del cine, que paradójicamente, casi nunca aparece en
las fichas técnicas de las películas.
Es un trabajo que tiene muchas satisfacciones,
ya que se aprecia en pantalla tanto como el del director de arte o los
diseñadores en general y complementa muy bien el trabajo del director, sobre
todo cuando de películas con exteriores y extras se trata. Por eso no entiendo cómo hoy la mayoría
de los jóvenes que aspiran a ser directores, desprecian este oficio y se lo
quieren “saltar” empezando como directores bisoños de películas llenas de malos
vicios y errores de todo tipo. De
ahí que sea tan difícil encontrar asistentes de dirección y si se les haya, no
son muy buenos, pues en muchos casos les falta la ética del oficio, los trucos
que todo oficio tiene y que al final ponen al asistente que es buen jefe de
escena, buen organizador, en mejores condiciones para dirigir una película con
el paso del tiempo.
Quisiera mencionar a un colaborador y
principal cómplice del asistente: el/la anotadora; otro de los “resistentes”
del equipo de rodaje, quien debe estar al tanto y llevar la memoria de todo lo
que hace el director, el maquillador, los vestuaristas, los ambientadores y los
actores y también del asistente del director atendiendo a la continuidad de
movimientos en sus puestas en escena de fondos. Este fue un cargo que por
criterios sexistas de la vieja industria se otorgaba a las mujeres, al punto
que es el único cargo con género definido (script girl ), por considerarse que
la mujer es más observadora que el hombre. He conocido continuistas hombres muy
eficientes, con una capacidad de observación, memoria y resistencia
envidiables.
La anotadora o anotador es el Pepe
Grillo, la conciencia buena de todos en el set y como decía antes, la memoria
del rodaje. Lo menciono, pues no creo que pueda hablarse del oficio del
asistente, sin hablar del o la continuista.
Con el tiempo, el trabajo del asistente
del director, se ha ido “tecnificando” gracias al desarrollo de los programas
de computación para hacer desgloses y resúmenes estadísticos de los mismos y
hasta la organización de los planes de trabajo. Existen varios programas muy útiles
como el Movie Magic Scheduling, que además de hacer el desglose, tiene una aplicación que
resume y agrupa por colores, los días, las noches, los exteriores de día y de
noche, cuenta los personajes principales y los extras, en fin, una maravilla
para aliviar el inmenso trabajo de hacerlo. En mi época, todo esto se calculaba
a mano, poniendo contando rallas y
ceritos, con una calculadora de mano y con mucha memoria. Todavía a mi llegada a Venezuela no
existían esos software en algunos trabajos como asistente que hice para ganarme
los frijoles y aún hoy conozco asistentes y productores muy buenos y de mucho
prestigio que prefieren ir por el método viejo y no usan los software. Por mi
parte, desde que los descubrí, los manejo y en las películas que he dirigido,
exijo que todos tengan ajustados sus datos según un Movie Magic Scheduling. Al final,
hasta los más escépticos me lo agradecen, por todo lo que facilita en ahorro de
tiempo y esfuerzo, que ya sabemos, en el cine se traduce en dinero.
No obstante, el asistente del director
sigue necesitando de mucha resistencia y agilidad física y de pensamiento; imaginación,
fuerza de carácter; gusto para la composición y los movimientos de la figuración de acuerdo al ritmo de
la escena y también al de los movimientos de cámara y su duración; estar pendiente de las necesidades del director y en comunicación constante con el camarógrafo cuando se prepara una puesta en cámara o durante los ensayos.
De todo esto
iré hablando poco a poco en sucesivas entregas y respondiendo preguntas si las hay, de todos aquellos que deseen probar fuerza y talento en este oficio.
Mario Crespo
Caracas, enero 2012.
[1] Germinal Hernández. Nació en La
Habana el 9 de noviembre de 1944. Empezó a trabajar en el Instituto Cubano del
Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) en diciembre de 1961 como auxiliar de
sonido. En 1964 pasó a trabajar como grabador de sonido. Entre sus trabajos de
grabador en documentales, cortometrajes y largometrajes se incluye también
doblajes y animados. Grabó, además, la música del Grupo de Experimentación
Sonora del ICAIC durante cinco años y dos años a la orquesta del ICRT. Realizó
algunos trabajos para el Noticiero ICAIC Latinoamericano desde el estudio de
Prado. Fallece en Ciudad de La Habana el 3 de junio de 2007.Sobre el trabajo del asistente del director 3
Toda una clase Mario. gracias!
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